viernes, 3 de febrero de 2012

Para ti, que aún me lees, después de tanto (demasiado) tiempo. Para mí, que, a veces, también lo necesito.

Pensé que no retomaría el bloc/blok hasta después de los exámenes. Supongo que lo necesitaba.
No tengo nada que decir.
Salvo, tal vez, que os echaba mucho de menos.
Como echaba de menos que las palabras fluyeran en mí.

Pero eso ya lo sabéis.


Zaragoza, 3 de febrero de 2012  C. C. Dávila, Gaviota.




Te dedico las sonrisas que me quedan,
aún son muchas;
te dedico el cansancio de estos días,
el maquillaje natural de mis ojeras,
las horas enfrascadas de trabajo,
por un sueño que vive a veces muy cercano,
y otras veces, se aleja.


Me pregunto cuán difícil es ser artista;
así, cuando no se ha sentido apenas,
qué decir, qué gritar, qué llorar...
Cuando todo parece una inmensidad;
todo existe ya en algún modo, y lo sabemos;
sólo nos queda reinventarnos a nosotros mismos,
y descubrir, casi como una magia; que también
fueron así otros, antes de nosotros.
como un niño que tiene miedo de entrar al mar,
de nadar contracorriente frente al mundo,
de hacer lo que quiere, y de quererlo.


Y encima, aparentar que hay algo más,
que nuestra lucha con la vida tiene algo de trascendental,
algo que nos hace diferentes,
aunque ser diferentes sea lo normal,
aunque para nosotros lo normal nunca lo sea,
aunque nos sorprendamos de cada detalle,
aunque busquemos de algún modo la incomprensión.
No podríamos dejar de hacerlo, no hay
otra forma ni otro camino;
no puedo volver a ser la que era, porque ya,
soy una persona diferente.


Cómo intentar ser artista, así
sin haber sufrido apenas;
y a la vez, cómo no intentar serlo,
cómo acallar esto que fluye dentro,
que nos grita libertad y autonomía,
esto que nace y nos cambia.
y quizá, sólo quede eso, una oportunidad,
una esperanza, vaga;
la de cambiar el orden de las cosas,
la de cambiar a las personas;
para volveras más puras...
vivas.


Para poder dedicarte, todas mis sonrisas,
aún son muchas;
y el cansancio de estos días,
y el maquillaje natural de mis ojeras...


Lo que soy.
Y ser, sólo ser, quedamente.



Pues eso... Para ti, sí, para ti que estás leyendo esto.
No tengo más, sólo mi vida puesta al descubierto. No espero que lo entiendan, ni que lo agradezcan.
Tan sólo, me haría ilusión, que también intentaran maravillarse con ello.
Cada nuevo día.

3 comentarios: